Después de los 15,000; la cuenta sigue...

domingo, 27 de marzo de 2011

Aquí y ahora en la 3a feria del Arte de San Cristóbal

Una de las premisas básicas que tiene el artista es mantenerse vigente. Aspecto que se logra a partir de varias líneas de acción, dos de las más socorirdas son la presencia a través de las exposiciones o circuitos de exhibición, y la creación de trabajos propositivos que impactan de forma extraordinaria en el público.
En el primer caso, es un efecto parecido al de la publicidad ya que es la repetición del nombre del artista lo que hace que éste esté presente en la memoria del posible consumidor, ya sea por referencia visual o porque el nombre es pegagoso.
En el segundo caso, hay variantes que nos hablan de ese efecto conocido como el de la sorpresa: qué tanto puede llamarnos la atención, y qué tanto se considera que tiene algo que lo distingue de los demás.

Estas reflexiones iniciales vienen a cuento a propósito de la obra de Rafael Araujo que está presente en la 3a Feria del Arte en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en el stand del grupo "Lugar de brujos". Ahí presenta una intervención que jaló la atención de los asistentes. No se hable más y que sean las imágenes las que hablen, aunque debo decir que el juego visual y el uso de materiales no convencionales fueron el eje sobre el cual se generó la sorpresa...


Vista del stand "Lugar de brujos"

Aquí y ahora de Rafael Araujo revisada por espectador.

Aquí y ahora, obra de Rafael Araujo revisada por público.
Aquí y ahora de Rafael Araujo observada por público.

Vista general del stand de "Lugar de brujos"

Aquí y ahora, de Rafael Araujo, Observada por público.

domingo, 20 de marzo de 2011

Como una pintura nos iremos borrando... o como un grabado

Ramiro Jiménez Pozo
(1934-2011)


Grabado de Ramiro Jiménez Pozo. 1998.





Grabado de Ramiro Jiménez Pozo. 1984.




Grabado de Ramiro Jiménez Pozo. 1962.




Grabado de Ramiro Jiménez Pozo. 1958



sábado, 5 de marzo de 2011

“Escribir es escuchar”: Jan De Vos.

Escritor, investigador y autollamado “historiador regional” Jan de Vos es ya contemplado entre los historiadores con mayor arraigo en Chiapas, miembro del CIESAS y autor de múltiples libros, ensayos y diversos escritos en variadas publicaciones, el maestro de Vos contempla ya el aura chiapaneco en él.


De origen belga y con más de 70 soles entrevistos, Jan de Vos fue presentado entre la admiración y respeto de catedráticos, alumnado y directivos en la inauguración de la maestría en Historia, en compañía del gran imaginante chiapaneco Eraclio Zepeda.

La conferencia a su cargo, titulada “Escribir es escuchar”, nos representa el mundo literario en el cual se sumerge cada escritor.

De manera amena y casi familiar, de Vos nos platicó con un modo muy suyo el modo de escribir, lo que conlleva hacer este arte, no de forma sistemática o muy estricta, sino que, tranquila, como que muy interior y pacifica, como él mismo señala “Es la persona que se encierra en su habitación (…) y a solas, voltea hacia adentro cuando piensa sobre escribir”.

Admirable es la forma de expresarse de Jan de Vos, mistifica en él una sencillez, que hace ver lo difícil o requeriente de esfuerzo y empeño como algo sensible y fácil.

No olvidando la raíz histórica, la conferencia tornó palabras resaltadas de aspecto pretérito en ella, “Escucho las voces que me vienen del pasado, en el caso del historiador” dijo ante la multitud presente.

Y en ello, rescatamos la valoración del título, “Escribir es escuchar”, y es que de eso se trata, según Jan de Vos, de escuchar todas esas voces que se sumergen y emergen de nosotros, de lo circundante, de lo vivo, y de lo muerto ya.

Más que una voz potente y clara, tenemos que esclarecer todas la voces, todas, aquellas que acuden a nosotros por medio de pensamientos, ideas, sueños y porque no, hasta por medio psíquico, como lo hiciera Madero. Destapar los oídos sordos ya en estos tiempos, y revivir esa sensibilidad, para desarrollar una buena escritura, verbos y sujetos dictados por voces.

Y dicta pues, para poder escribir mejor Historia: La libertad de pensar, sabiduría y el tiempo lineal y circular. Y especifica ya: “Necesitamos la Historia para la vida y para la acción” No basta solo con saber, con escribir párrafos extensos en libros regordetes, no, se extiende hasta zonas vastas en donde se dibuja el historiador como agente de cambio social y cultural.

Vaya que la conferencia dictada por el maestro, fue enriquecedora y no llana, parecía tal cual cátedra de un viejo padre a sus vástagos, dando consejos para desarrollar mejores letras, para que este pueblo no carezca en futuro de escritores que escuchen bien, para adentrarse en uno y dar escrito a ello, para ser pues, sabicultores en la milpa académica.


Karla Camacho

jueves, 3 de marzo de 2011

La gracia del guiñol

Un muñeco es una fantasía hecha realidad. El truco no está en qué tanto se apega a las imágenes que tenemos de nuestra vida cotidiana y de nuestro pasado inmediato. Más bien, funcionan como objetos sobre los cuales proyectamos los recuerdos, tanto si son ideas, imágenes, emociones o percepciones. Aunque a veces, funcionan como detonadores de otro tipo de sensaciones, de aquellas con las que se relaciona el arte.

Muñecos de Rafael Araujo, Foto: René Araujo
Cuando son muñecos propios, escogidos por uno, son objetos recepetores de esa proyecciones de las que hablo. Pero si los encontramos en otros espacios, se vuelven inpersonales.

Muñeco elaborado por Rafael Araujo
Si el espacio es teatral, entonces, hablamos de expreiencias artísticas. No estéticas, aunque pueden hacerse reflexiones desde ese segmento de la filosofía. En el teatro guiñol, parte de su escencia es la historia, la acción dramática. En este sentido, el muñeco, bien o mal hecho, cumplirá con su misión si es un buen actor, si representa bien su papel, entocnes, el muñeco, debe saber leer el texto dramático, y el muñeco, al final, es sólo una persona en el papel de muñeco, un actor pues.
Felicidades a los muñecos y muñecas! qué no?